Decir que el debate presidencial celebrado el domingo en Brasil era "esperado", es quizás quedarse corto. Por primera vez, el país sudamericano y el mundo entero pudo ver frente a frente al Presidente Jair Bolsonaro con su mayor rival político y favorito a quedarse con el triunfo, el ex Mandatario Luiz Inácio Lula da Silva, y, en ese punto, las expectativas se cumplieron. Acusaciones de lado y lado, alusiones a temas como la corrupción y la equidad de género, peleas entre seguidores y duras críticas a otros mandatarios de Latinoamérica marcaron el evento que también tuvo a otros cuatro candidatos.
El debate fue el fiel reflejo de lo que se ha definido como la campaña electoral más polarizada de las últimas décadas en Brasil, y a poco más de un mes de los comicios, se espera que esta crispación aumente.
Fuertes acusaciones
Como era de esperarse, la corrupción fue uno de los temas más tratados en el debate, y ahí los dardos fueron principalmente para Lula, quien estuvo detenido y condenado a 12 años de prisión en el marco del caso Lava Jato, pero luego fue absuelto. En esa línea, Bolsonaro lideró los ataques, sin filtro. "Su gobierno fue el más corrupto en la historia de Brasil", dijo el Mandatario brasileño, entregando cifras sobre el mayor escándalo de corrupción que manchó a toda la política del país.
"Era una cleptocracia, un gobierno basado en el robo... ¿Para qué quieres volver al poder? ¿Para volver a hacer lo mismo con Petrobras?", remarcó Bolsonaro. Lula, por su parte, trató a su rival de mentiroso y le acusó de "destruir" el país y acabar con el crecimiento económico y las medidas contra la pobreza impulsadas por el ex Mandatario y su sucesora, Dilma Rousseff. En tanto, el candidato Ciro Gomes -tercero en las encuestas a gran distancia de Lula y Bolsonaro- acusó al actual jefe de Estado de ser "insensible" por haber negado, el pasado viernes, que en Brasil exista hambre de verdad.
El silencio de Lula
Uno de los hechos que llamó la atención fue el momento que Lula da Silva quedó completamente en blanco, dejando un silencio de largos segundos que fue muy comentado en las redes sociales. El hecho ocurrió después de que el líder del Partido de los Trabajadores fuera cuestionado por los hechos de corrupción durante su mandato. Fue en ese momento que el ex Presidente quedó en blanco y en completo silencio. La sonrisa de Bolsonaro no se hizo esperar.
Casi a los golpes
Y si la situación era tensa en el set de televisión, fuera de éste también. Si bien el evento no contó con público dentro del estudio, en una sala contigua se encontraron los seguidores de cada candidato, y el ambiente se fue caldeando a medida que avanzaba el debate.
El hecho más escandaloso lo protagonizaron el diputado federal André Janones, adherente de Lula, y el ex ministro bolsonarista de Medio Ambiente, Ricardo Salles, quienes tuvieron que ser separados por los servicios de seguridad. La pelea se dio luego de que Lula se refiriera a las políticas medioambientales. Acto seguido, Janones le grita "bandido" y "sinvergüenza" al ex ministro, quien le recordó al diputado las acusaciones de corrupción en su contra.
Ataque misógino
Jair Bolsonaro también protagonizó uno de los momentos más comentados de la noche, luego de atacar a la periodista del grupo Globo Vera Magalhaes por sostener en una pregunta que el Mandatario entregó información errónea sobre las vacunas contra el covid-19. "Vera, duermes pensando en mí, tienes algún tipo de enamoramiento... no puedes tomar partido en un debate como este y hacer acusaciones mentirosas sobre mí. Eres una vergüenza para el periodismo brasileño", dijo el gobernante.
La intervención de Bolsonaro generó numerosas críticas de los otros candidatos presentes. La senadora Simone Tebet trató al Presidente de misógino y lo acusó de ser un defensor de violadores y torturadores de mujeres durante la dictadura militar brasileña. Este fue uno de los momentos altos de Tebet, quien de acuerdo con la encuesta de Datafolha realizada después del debate, fue evaluada como la de mejor desempeño, con el 43% de las preferencias. El Mandatario acusó una "victimización de la mujer" e incluso manifestó que liberó el porte de armas para que las campesinas pudieran defenderse.
Acusación contra Boric
Ya al final del evento, Jair Bolsonaro aprovechó su última intervención para atacar a Lula y sus vínculos con otros líderes de la izquierda latinoamericana, donde mencionó a presidentes como Gabriel Boric y el argentino Alberto Fernández.
"El ex presidiario apoyó a Chávez, apoyó a Maduro. Y mira cómo está Venezuela", partió diciendo.
Luego, el líder derechista mencionó a otros líderes. "Miren hacia dónde va Argentina. El Presidente de Argentina visitó a Lula en la cárcel. Hoy 40 por ciento de la población argentina está a la miseria. Lula apoyó al candidato que en Chile incendiaba el metro, en Colombia al candidato que está a favor de liberar las drogas y los presos. Lula apoya a Daniel Ortega en Nicaragua persiguiendo a religiosos".
.jpg)
.png)
